5 maneras de hacerse fuerte amigo del fracaso

5 maneras de hacerse fuerte amigo del fracaso

Comete errores en las hojas de cálculo, obtén orientación de tu trabajo o elige la carrera profesional equivocada. El fracaso, en muchas formas diferentes, nos afecta a todos, incluso a los más exitosos, en algún momento.

Escuché el viejo dicho: «La forma es temporal, la clase es eterna», y el fracaso es solo eso: temporal. De hecho, sé por mi propio viaje que con la mentalidad y la actitud correctas, el fracaso puede ser lo que te lleve a algo más grande.

Realmente se trata de redefinir lo que cree que sabe sobre el fracaso y reconocer que dos pasos adelante y un paso atrás es una característica a menudo necesaria en el camino hacia el éxito.

Obviamente, esto es más fácil decirlo que hacerlo. Nuestra cultura recompensa a aquellos que luchan por la perfección, pero como todos sabemos que la perfección no existe, ¿por qué tener expectativas tan poco realistas de ti mismo?

No se trata de decidir qué hacer si fallas, se trata de saber qué hacer cuando fallas.

Cinco maneras de ser amigos firmes del fracaso:

#1: saber por qué

Para aceptar tu fracaso, debes tener el coraje de levantarte y enfrentar tus miedos. Nunca subestimes la importancia de la primera etapa. Tratar de rechazar situaciones y emociones incómodas es una respuesta humana natural. Después de todo, todos hemos cometido errores tratando de enterrarlo en la arena, pasar la pelota o poner excusas.

Pero si realmente quieres crecer y aceptar el fracaso, esta ya no es una opción.

Después de que algo sale mal, no se preocupe por tratar de corregir el error o quién podría verse afectado por él; primero debe comprender qué salió mal.

Identifíquese, en lugar de culparse, y evalúe de manera realista las consecuencias de su error y por qué permitió que sucediera. Hacer esto antes que nada es crucial.

#2: Tomar posesión

Una vez que haya identificado lo que salió mal, por qué y por qué, y cómo puede prevenirlo en el futuro, es hora de tomar posesión.

Ya sea que sea un empleado o propietario de un negocio, todos en esta organización esperan la madurez, el coraje y la fuerza de su carácter para decir que algo no está yendo exactamente como usted desea.

Esto no necesita ser un proceso largo. Es tan simple como sentarse con un colega, o incluso sentarse por sí mismo para examinar por qué falló su inicio, por qué olvidó enviar ese correo electrónico importante y, lo que es más importante, qué está haciendo para asegurarse de que no vuelva a suceder. .

“No existen los fracasos, solo los resultados.” – Tony Robbins

#3: Lecciones Aprendidas

Aprender del fracaso es un aspecto clave para hacer las paces contigo mismo. Cuando reorganizas tu proceso de pensamiento, puedes darte espacio para convertir el fracaso en una oportunidad.

Piense en cualquier gran logro en su vida: un ascenso, comprar su primera casa o tener un bebé, cada uno de los cuales requiere un cambio en su forma de pensar, especialmente el último.

Lo mismo se aplica cuando cometes errores: después de todo, ¿cuál es el punto de moderarte para una humanidad innata? Todo son errores y, en última instancia, fracasos.

Una vez que te mires en el espejo y aceptes tu destino, promete aprender algo de él.

Sin embargo, antes de continuar, date una palmadita en la espalda. Aunque, sí, cometiste un error en alguna parte, celebra que aprendiste algo nuevo en el camino.

#4: Seguir adelante

Muchas veces no es el error en sí mismo el que causa el daño. Este es el efecto duradero de la culpa y el arrepentimiento incontrolables.

No dejes que la experiencia del fracaso arruine tu futuro; no dejes que defina tu vida y cómo interactúas con la búsqueda del éxito. Repetir tu pasado una y otra vez y desear que las cosas fueran diferentes no solucionará nada.

La vida es injusta, nunca lo ha sido y nunca lo será, nunca caigas en la trampa de sentirte como si fueras una víctima y no lo eres, lo importante es aceptar eso y seguir adelante.

Perdonarte a ti mismo es la parte más importante de aceptar el fracaso. Si ve estos recuerdos como experiencias negativas, caerá en una trampa de víctima. En su lugar, siga recordándose lo que ha aprendido mientras tanto.

#5: Comparta su experiencia

Compartir lo que has aprendido con quienes te rodean es una excelente manera de liberarte del fracaso. Dicho esto, es importante enmarcar tu narrativa de la manera correcta, ya sea que estés hablando como empleador, empleado o amigo.

No digas, «Dios mío, soy tan estúpido, adivina lo que me pasó hace unas semanas.» No te des la oportunidad de caer en viejos hábitos y retractarte de tu narrativa.

Use su nueva perspectiva para guiar la historia: «Adivina lo que me pasó hace unas semanas. Fue un día difícil, pero realmente aprendí una lección difícil».

Al contar tu historia de esta manera, puedes combinar cada uno de los cinco puntos de los que hablamos en esta publicación.

La información expuesta en este artículo es de índole informativo, se recomienda siempre comparar información con otras fuentes de internet, antes de tomar una decisión sobre cualquier aspecto.